Persevera en la oración. -Persevera, aunque tu labor parezca estéril. -La oración es siempre fecunda.
(Camino 101)

martes, 9 de marzo de 2010

Vivir la parábola del hijo pródigo

La vida mía, imagino que la vuestra también, es vivir la parábola del hijo pródigo. Ir cada día al Señor a decirle: Señor, que no he sabido...

2 comentarios:

  1. Me encanta esta frase del Padre, él que tanto supo..., Nosotros que tan poco sabemos cada día. Cuanto necesitamos la sabiduría de Dios, esa que nos lleva a amar y aceptar sin entender muchas veces, como la de Sta. María..., hágase tu voluntad".
    Padre, que como tú, aprendamos a fiarnos en las manos de Aquel que todo lo puede, para sintiéndonos pequeños, crecer en la plenitud de sentirnos hijos tuyos, confiados, viviendo la infancia espiritual de aquel que sabe que está en las mejores manos.

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